Desde la Enzina queremos analizar las claves de una batalla que ha teñido varios meses este año de pandemia: la que han protagonizado los trabajadores de Nisan. Han sido meses de preocupación por los empleos directos e indirectos, de hacerse eco en los medios como colectivo por una lucha ejemplar. Pero, ¿es eso lo único que se juega en este tipo de cierres?

En juego está mucho más: si lo que avanza en el país es la industria, con el saber hacer y la infraestructura que lo sustenta, o bien la economía de ladrillo y turismo de playas. Se juega el destino de todos.

Conscientes de que lo que se suceda con Nisan, con Alcoa, va más allá de la preservación de los empleos, entrevistamos a Carlos.

E: Carlos, gracias por acceder a esta entrevista para La Enzina, como trabajador y miembro sindical de Sigen-USOC.

Desde 2009 llevabais denunciando una bajada productiva. ¿Esto ya os lo veíais venir?

C: Todas las furgonetas que estábamos haciendo nosotros en Zona Franca son las que poco a poco se fueron llevando a Francia en 2009, en concreto, la Trafic X83. Empezaron a llevarse la producción de este vehículo, que hacíamos para tres marcas: Renault, Opel y Nissan.

E: ¿Cuál crees que ha sido la causa que ha abocado al cierre, que se efectuará en diciembre de 2021?

C: El cierre hay que verlo a nivel global, de alianza, entre Renault-Mitsubishi y Nissan para distribuirse el mercado mundial. Y la zona que nos toca a nosotros, que es la europea, se la queda Renault. Ha sido decisión de Renault, porque en esa alianza es quien tiene más peso. Es un reparto entre empresas y nuestra fábrica la han dejado morir.

E: ¿Consideráis que sois competitivos como planta de producción?

C: Los vehículos que hemos hecho todos estos años han salido con mucha calidad y prácticamente sin medios. Los números de coste por vehículo salen menores ahora aquí que en Francia.

Los sindicatos estuvieron batallando a nivel europeo para hacer fuerza para que no se pudiera cerrar la fábrica de Barcelona, y emitieron un informe negativo acerca del argumento de la “falta de competitividad” con el que se acusaba a nuestra planta.

Cuando decimos que ha habido voluntad de dejarla morir, se ve en lo concreto. Se gastaron por ejemplo dinero para inversiones en una planta de pintura que no se llegó ni a hacer. Sólo hay el agujero para ubicarla.

E: El gobierno francés ha reforzado su cuota de Renault en acciones para poder intervenir. ¿Qué sensación tenéis al respecto? ¿Por qué el gobierno en Francia toma las riendas y defiende su industria y nuestro gobierno no lo hace?

C: Hay gobiernos que sí captan y tienen acciones de las empresas y pueden tomar las riendas, y con eso se sitúan por encima o con ventaja de nosotros, ya que España eso no lo practica. Es obvio que de esta forma defienden los puestos de trabajo en su país, y nuestro gobierno, al no actuar de esta manera, no los defiende.

Por otro lado, nos perjudica el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores, que permite que la empresa pueda decidir cuándo aplicar el expediente de regulación sin que el gobierno ni las administraciones puedan hacer nada. Por eso hemos sido los trabajadores, el comité de empresa, quienes hemos tenido que actuar para doblegar la situación. El poder cambiar o derogar este artículo sería un logro muy importante para la clase trabajadora.

E: ¿Los dirigentes políticos y administraciones, tienen responsabilidad?

C: Sí que tienen responsabilidad. Cuando llega la hora de actuar, miran hacia otro lado, se quitan de en medio.

E: ¿Has podido vivir la experiencia del viaje y la negociación en Corrales de Buelna, Cantabria?

C: Desde Barcelona fuimos a Cantabria y empezamos a hacer algún contacto que otro, pero la empresa insistía en su objetivo, que era cerrar este año sí o sí. Los compañeros estuvieron casi 38 horas negociando. Yo estaba en las puertas apoyando.

En Corrales de Buelna, en el pueblo, al principio de nuestra llegada se asustaron un poco por todo el dispositivo policial que nos habían preparado. Con ese preparativo intentaron desestabilizar, los habitantes nos miraban con recelo, pero luego vieron que nosotros íbamos a reivindicar nuestros puestos de trabajo y la verdad que la experiencia posterior fue muy buena. La gente se volcó con nosotros en la calle a hacer una manifestación por el centro del pueblo.

La decisión que tomamos fue que los trabajadores de Barcelona nos moviéramos a Cantabria para dar apoyo a una zona más aislada, con pocos trabajadores y con complicaciones a nivel de relación con la empresa. Fuimos para reivindicar lo de todos, pero también para reforzar a esos trabajadores en concreto.

El resultado es que en Corrales de Buelna la fábrica se mantiene de forma indefinida. Primero ganamos la batalla en allí y luego en Barcelona.

E: En Barcelona… antes de agosto estuvisteis manteniendo una larga huelga.

C: Estuvimos batallando casi 95 días de huelga indefinida, que empezó en el mes de mayo. Se inició con la fábrica de Nissan que hay en Montcada i Reixac y luego continuó con la huelga indefinida de Sant Andreu de la Barca. Con estos dos centros pudimos parar la producción de vehículos en Zona Franca, al ser centros interdependientes. O sea, parando solamente dos fábricas con poca gente pudimos alargar la huelga indefinida hasta los 95 días, y tras las negociaciones se firmó el acuerdo en Zona Franca.

Fue una estrategia muy buena por parte del comité de empresa, porque la empresa no quería ni sentarse a hablar, y se vio forzada a negociar por la huelga.

E: ¿Os intentaron dividir?

C: Sí, la empresa intentaba dividir intentando acordar algo diferente con cada sindicato. Pero en eso no han logrado quebrarnos, hemos mantenido mucho la unidad.

E: ¿Estáis contentos con el acuerdo? La mediadora reconoció que os admiraba por la firmeza y valentía demostrada.

C: El acuerdo de Zona Franca fue bueno, porque repercute a una gran masa trabajadora que de otra forma se vería abocada a perder sus años de antigüedad y luego, a la hora de jubilarse, que no le quedara lo mismo. Es decir, mejores indemnizaciones. Hemos conseguido además retrasar el cierre a un año.

Otro logro es que los trabajadores entramos a formar parte de una mesa de reindustrialización donde tomamos partida por el tipo de proyecto futuro que ha de venir a ocupar esta actividad que deja Nissan. Hemos conseguido que Nissan se emplace a hacer la reindustrialización, a lo que en un principio se negaba totalmente.

E: ¿Habéis tenido relación con compañeros que han sufrido algo parecido, como los de Alcoa?

C: Hemos tenido mucha relación con los trabajadores de Alcoa. Habíamos quedado para ir a Madrid juntos a finales de julio, pero ellos no pudieron asistir por el problema del Covid, y sí que ha habido compañeros que han ido a Galicia a apoyarlos en manifestaciones.

E: A ver si termina la pandemia y se pueden retomar las luchas en otras condiciones…

C: Sí, la pandemia ha sido un lastre porque no hemos podido reivindicar y hacer las movilizaciones que querríamos haber hecho.

E: ¿Qué empresa o actividad tienen pensada para cuando se cierre?

C: No lo han desvelado y de momento no creo que la desvelen, para que no haya problemas con las empresas que puedan venir y se proponga competencia desde otras ciudades por atraer ese proyecto. Hay una pugna por ver quién se lo lleva.

E: Ya como curiosidad, ¿qué ocurre con esos coches pintados abajo? [Se ven coches marcados con letras en espray desde la azotea de la fábrica]

C: Son vehículos que tienen componentes tanto de Mercedes como de Nissan, y pertenecen a Mercedes. Como cualquier vehículo, tienen que dar garantía de las piezas por diez años, que es lo que pide la legislación.

Como ya cerraron contrato con Nissan el pasado mes de marzo, para no tener que dar esa garantía, marcan los coches con unas siglas para llevarlos al desguace y destrozarlos. La casa de recambios que tiene contratado para Mercedes se desvincula de estas piezas.

E: Muchas gracias por esta visión tan amplia. La población de conjunto os tenemos mucho que agradecer a los que sois punta de lanza en estas batallas, que llevan a tener derechos colectivos.

C: Si nosotros lo hemos conseguido, cualquier empresa un poco grande lo puede hacer. En nuestro caso, ha sido importante el apoyo de partidos minoritarios y de gente de a pie que nos ha ayudado ingresando en la caja de resistencia. Con eso hemos podido sufragar a los trabajadores que participaban en la huelga indefinida.

Para doblegar a una multinacional como en este caso, necesitas un pulso fuerte ante la empresa, y el respaldo es la caja de resistencia.

E: Que viva la lucha de la clase obrera. Un placer.

C: Un placer, gracias.